Inicio » Clima » El planeta errante que bate récords de crecimiento intrigando a la astronomía

Planeta errante con crecimiento record

Un objeto de masa planetaria que vaga sin estrella anfitriona está creciendo a un ritmo que rompe todos los registros. Las observaciones realizadas con el Very Large Telescope (VLT) del Observatorio Europeo Austral muestran que traga gas y polvo a una cadencia descomunal: unos seis mil millones de toneladas cada segundo.

El protagonista, denominado Cha 1107-7626 , se encuentra en la constelación de Camaleón, a unos 620 años luz. Con una masa estimada entre cinco y diez veces la de Júpiter, este planeta errante se halla aún en formación y se alimenta de un disco circundante, pero lo más llamativo es que su apetito varía de manera notable.

Un estirón cósmico sin precedentes

Crecimiento record en planeta errante

La materia del disco cae sobre el objeto en un proceso de acreción, pero no a un ritmo fijo. El equipo que lidera Víctor Almendros-Abad constató que, entre junio y agosto de 2025, la tasa se disparó hasta ocho veces respecto a meses anteriores, alcanzando el registro de 6.000 millones de toneladas por segundo.

Se trata del episodio de acreción más intenso medido para un planeta errante, y de hecho para cualquier planeta. Para hacerse una idea de la magnitud: si la Tierra hubiera crecido a esa velocidad, habría alcanzado su masa actual en apenas decenas de miles de años, un suspiro en términos astronómicos.

Los cambios se reflejaron en el brillo y en ciertas líneas del espectro que trazan cómo entra el material en el entorno inmediato del planeta. Esas firmas espectrales delatan variaciones rápidas en la caída de gas y polvo, coherentes con un estallido de acreción.

Cómo se midió: telescopios e instrumentos

Observaciones con telescopios para planeta errante

La investigación se apoyó en el espectrógrafo X-shooter del VLT, en el desierto de Atacama (Chile), capaz de cubrir un amplio rango de longitudes de onda con gran sensibilidad. Es allí donde se recogieron los datos clave que captaron el salto en la tasa de acreción.

Para reforzar el análisis, el equipo combinó observaciones del Telescopio Espacial James Webb y recuperó información de archivo del instrumento SINFONI, también del VLT. La comparación antes-durante del estallido mostró un aumento de seis a ocho veces en los flujos de líneas, una huella inequívoca de entrada de materia acelerada.

El estudio, aceptado para su publicación en The Astrophysical Journal Letters (doi: 10.3847/2041-8213/ae09a8), subraya el valor de la espectroscopía de alta calidad para seguir en tiempo real la evolución de objetos de masa planetaria que, por su tenue brillo, resultan esquivos.

Qué implica para el origen de los planetas errantes

Origen y formacion de planetas errantes

El hallazgo aporta pistas sobre cómo se forman estos cuerpos. Una de las grandes cuestiones es si los planetas errantes son gigantes expulsados de sistemas jóvenes o si nacen más bien como estrellas de muy baja masa que nunca llegan a encenderse. Las evidencias en Cha 1107-7626 inclinan la balanza hacia procesos típicos de las protoestrellas.

La actividad magnética parece haber actuado como desencadenante del episodio de caída de materia, un mecanismo visto en estrellas jóvenes pero no documentado hasta ahora con tanta claridad en un planeta. Además, durante el estallido se detectó vapor de agua en el entorno inmediato, ausente en las observaciones previas, otra similitud con los estallidos estelares.

Para Aleks Scholz, coautor del trabajo, estos resultados “difuminan la línea entre estrellas y planetas” al revelar comportamientos compartidos en sus primeras etapas. En la misma línea, Belinda Damian apunta que eventos como este acercan la física de ambos escenarios y permiten revisar modelos de formación.

Mirando al futuro, el Telescopio Extremadamente Grande (ELT) de ESO, actualmente en construcción en Atacama, ofrecerá la sensibilidad y la resolución necesarias para localizar y estudiar más mundos de este tipo. Su combinación de instrumentos punteros y gran espejo principal podría destapar una población numerosa de planetas errantes todavía oculta.

La fotografía que dejan estos datos es la de un mundo solitario, masivo y joven, capaz de alternar periodos de calma con frenéticas ráfagas de crecimiento. Cha 1107-7626 se afianza así como el planeta errante con la acreción más extrema registrada, un laboratorio natural para explorar cómo nacen y evolucionan los cuerpos planetarios cuando no hay una estrella cerca que marque el compás.